Título original: La sombra de su secreto
Páginas: 384
Publicación: 2016
Editorial: Vestales
Categoría: Romántica Histórica
Páginas: 384
Publicación: 2016
Editorial: Vestales
Categoría: Romántica Histórica
Sin pensarlo, sin proponérselo, el conde de Falmouth se topa con la persona indicada. Busca a alguien que pueda educar a su hermano, un muchacho tímido, reservado, hasta hosco, que es el heredero del condado, luego de que la familia del conde sufriera un fatal accidente. Sin proponérselo, entonces, se encuentra con Emily Browning, que trabaja como redactora de cartas para los que no saben escribir, y decide contratarla.
Pese a la aprensión que le provoca en un primer momento, pese a que el conde le parece una persona oscura, de carácter intratable, que siempre quiere tener la razón, Emily acepta porque mudarse a la residencia del noble es la mejor forma de conseguir un sustento para ella y para su hermana, ambas huérfanas, además de la posibilidad de mantener oculto el secreto que la acompaña, que la ensombrece.
Ubicada en Falmouth Manor, para sorpresa de todos, la muchacha trabará una excelente relación con Alexander, el díscolo heredero. Además, noche tras noche, en cada una de las charlas con el conde, en las sucesivas partidas de ajedrez, vencerá la desconfianza inicial, descubrirá que, sin proponérselo, el conde la atrae como nunca le había sucedido y que él también guarda un secreto.
Pese a la aprensión que le provoca en un primer momento, pese a que el conde le parece una persona oscura, de carácter intratable, que siempre quiere tener la razón, Emily acepta porque mudarse a la residencia del noble es la mejor forma de conseguir un sustento para ella y para su hermana, ambas huérfanas, además de la posibilidad de mantener oculto el secreto que la acompaña, que la ensombrece.
Ubicada en Falmouth Manor, para sorpresa de todos, la muchacha trabará una excelente relación con Alexander, el díscolo heredero. Además, noche tras noche, en cada una de las charlas con el conde, en las sucesivas partidas de ajedrez, vencerá la desconfianza inicial, descubrirá que, sin proponérselo, el conde la atrae como nunca le había sucedido y que él también guarda un secreto.
Opinión personal:
He tenido bastantes emociones encontradas con este libro. Vengo de releer varias veces algunos de los libros de Diana Gabaldon y, sinceramente, no me apetecía leer ninguno de los libros que tengo disponibles ahora mismo. La verdad es que la sinopsis me resultó muy sugerente y por eso decidí darle una oportunidad.
Empecé el libro con bastantes reservas y con la certeza de que iba a decepcionarme, ya sea la historia en sí o la forma de escribir de la autora. Sin embargo, aunque el comienzo no me resultó demasiado emocionante ni atrayente... con un poco de paciencia y una vez que la protagonista decide aceptar el trabajo como insitutriz la cosa mejora bastante.
En realidad, la forma de escribir de la autora está bastante bien y recrea situaciones muy tiernas sin resultar nada empalagosa. Más bien al contrario, consigue escenas románticas a pesar de no utilizar frases o espresiones demasiado cargadas de emociones o sentimiento. Me gustó especialmente la primera "clase" entre Emily y Alexander (el hermano pequeño del protagonista, John).
El suspense está presente en forma de secretos. Los dos protagonistas tienen un secreto y una tragedia propia que ocultar, así como sentimientos de culpabilidad y dolor. A veces resulta algo forzado la forma de tocar de pasada el tema y el esfuerzo de los protagonistas por no revelar el secreto... pero tampoco es algo demasiado repetitivo como para entorpecer la lectura.
Me gusta mucho la forma en que la autora ha "construido" la atracción y el amor entre los personajes. Me fastidian bastante esas historias en las que los protagonistas sienten una irresistible atracción prácticamente desde el primer instante. Aunque en ocasiones puedan darse esas situaciones en la vida real, la mayoría de las veces no es así, e implica ciertos choques, roces y encuentros antes de notar esa primera señal de atracción, ya sea física o intelectual.
Emily y John tienen un primer encuentro más bien desagradable, debido sobre todo a la forma directa y sin adornos en que hablan con sinceridad, llegando a resultar groseros e insensibles. Sin embargo, una vez aceptado ese "defecto o virtud", los personajes pueden comenzar a interpretar y comprender qué se esconde detrás de cada comentario y qué sienten en realidad.
Me hubiese gustado algo más de profundidad en los personajes secundarios y quizás algunos detalles más en los recuerdos o una mayor recreación en algunas de las "escenas importantes". Por ejemplo, algunas escenas más de la forma de interactuar entre John y su hermano Alexander, alguna escena entre Mary, Alexander y Emily en el invernadero, alguna conversación que de a entender por qué "el malo" de la historia siente y actúa como lo hace... etc. Todas esas escenas pueden resultar innecesarias para la trama principal Emily/John, pero enriquecerían muchísimo la historia en general.
Se trata de un libro de literatura romántica blanca, es decir, no tienen ninguna escena subida de tono, ni besos apasionados, ni sexo, ni tampoco se insinúan escenas de ese tipo. Yo, particularmente, no iba buscando ese tipo de escenas y no las he echado de menos, pero también es algo a tener en cuenta, pues muchas veces la mera insinuación de los deseos y pasiones puede potenciar los sentimientos que se describen.
En conclusión, aunque pueda parecer que he criticado mucho la historia, me ha parecido bastante entretenida y agradable. Teniendo en cuenta que mis lecturas previas eran de libros que me emocionan muchísimo y que se encuentran entre mis favoritos, esta historia ha conseguido mantener mi interés e incluso emocionarme. Por tanto, lo recomiendo como lectura romántica "suave", sobre personas llenas de dolor y con personajes amados bajo su responsabilidad que, a pesar de todo, consiguen su oportunidad de encontrar el amor.
Empecé el libro con bastantes reservas y con la certeza de que iba a decepcionarme, ya sea la historia en sí o la forma de escribir de la autora. Sin embargo, aunque el comienzo no me resultó demasiado emocionante ni atrayente... con un poco de paciencia y una vez que la protagonista decide aceptar el trabajo como insitutriz la cosa mejora bastante.
En realidad, la forma de escribir de la autora está bastante bien y recrea situaciones muy tiernas sin resultar nada empalagosa. Más bien al contrario, consigue escenas románticas a pesar de no utilizar frases o espresiones demasiado cargadas de emociones o sentimiento. Me gustó especialmente la primera "clase" entre Emily y Alexander (el hermano pequeño del protagonista, John).
El suspense está presente en forma de secretos. Los dos protagonistas tienen un secreto y una tragedia propia que ocultar, así como sentimientos de culpabilidad y dolor. A veces resulta algo forzado la forma de tocar de pasada el tema y el esfuerzo de los protagonistas por no revelar el secreto... pero tampoco es algo demasiado repetitivo como para entorpecer la lectura.
Me gusta mucho la forma en que la autora ha "construido" la atracción y el amor entre los personajes. Me fastidian bastante esas historias en las que los protagonistas sienten una irresistible atracción prácticamente desde el primer instante. Aunque en ocasiones puedan darse esas situaciones en la vida real, la mayoría de las veces no es así, e implica ciertos choques, roces y encuentros antes de notar esa primera señal de atracción, ya sea física o intelectual.
Emily y John tienen un primer encuentro más bien desagradable, debido sobre todo a la forma directa y sin adornos en que hablan con sinceridad, llegando a resultar groseros e insensibles. Sin embargo, una vez aceptado ese "defecto o virtud", los personajes pueden comenzar a interpretar y comprender qué se esconde detrás de cada comentario y qué sienten en realidad.
Me hubiese gustado algo más de profundidad en los personajes secundarios y quizás algunos detalles más en los recuerdos o una mayor recreación en algunas de las "escenas importantes". Por ejemplo, algunas escenas más de la forma de interactuar entre John y su hermano Alexander, alguna escena entre Mary, Alexander y Emily en el invernadero, alguna conversación que de a entender por qué "el malo" de la historia siente y actúa como lo hace... etc. Todas esas escenas pueden resultar innecesarias para la trama principal Emily/John, pero enriquecerían muchísimo la historia en general.
Se trata de un libro de literatura romántica blanca, es decir, no tienen ninguna escena subida de tono, ni besos apasionados, ni sexo, ni tampoco se insinúan escenas de ese tipo. Yo, particularmente, no iba buscando ese tipo de escenas y no las he echado de menos, pero también es algo a tener en cuenta, pues muchas veces la mera insinuación de los deseos y pasiones puede potenciar los sentimientos que se describen.
En conclusión, aunque pueda parecer que he criticado mucho la historia, me ha parecido bastante entretenida y agradable. Teniendo en cuenta que mis lecturas previas eran de libros que me emocionan muchísimo y que se encuentran entre mis favoritos, esta historia ha conseguido mantener mi interés e incluso emocionarme. Por tanto, lo recomiendo como lectura romántica "suave", sobre personas llenas de dolor y con personajes amados bajo su responsabilidad que, a pesar de todo, consiguen su oportunidad de encontrar el amor.
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